EL MUNDO DE LOS CIEGOS Y DE LOS SORDOS
OCTUBRE
DIA 04
“Sordos oíd, y vosotros, ciegos, mirad para ver. ¿Quién es ciego, sino mi siervo? ¿Quién es tan sordo como mi mensajero que envíe? ¿Quién es tan ciego como mi escogido, tan ciego como el ciervo de Jehová, que ve muchas cosas y no advierte, que abre los oídos y no oye? (Isaías 42:18-20)
Había una vez un pueblo de ciegos y de sordos, éstos últimos como podían ver, guiaban de la mano a los no videntes, quienes podían oír el sonido del agua, y beberla. Pero era un mundo limitado, nadie los quería visitar porque demoraban para entender las enseñanzas.
Este cuento personal, me recuerda al pueblo de Israel, que no captaba la voluntad de Dios. Era torpe, no miraba ni escuchaba la revelación de Dios, ni estaba atento a las circunstancias de la época.
Los v.18-25 son una respuesta a la queja de los israelitas en el exilio. Según Isaías 40:27, ellos se lamentaban que Jehová no se daba cuenta del triste destino que les había tocado. Ahora el Señor les responde que los verdaderos ciegos y sordos son ellos, que ven y oyen, pero no comprenden lo que Jehová les está diciendo a través de los acontecimientos. (RV95)
Este siervo era Israel que tenía que adorar solamente a Dios, quien no comparte su gloria con nadie, y a quien debían de obedecer.
¿Deseas captar la voluntad de Dios? Estudia la Biblia, obedécela. Ora al Señor, mantente en sintonía diaria con Él. ¿Estás atento al suceso del día? Dios habla por medio de las circunstancias.
Mira a Dios, escucha su voz para obedecerle y servirle. Ora para que el Señor nos use para cambiar vidas.
REFLEXION:
Se cuenta que un joven solo en un naufragio, oró a Dios que lo ayudará. Pasó por su lado, un bote y el hombre no hizo caso. Un barco y el joven no le dio importancia. Él reclamó a Dios porque no le ayudaba. Una voz le dijo, te he enviado ayuda y no te has dado cuenta.
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